6 Ética de las Finanzas 180718

151 Tercera parte

Otro tema conflictivo que da lugar a abusos es el de las relaciones cliente-proveedor, cuando entre ambos hay una gran asimetría de tamaño, de poder y, con frecuencia, hasta de capacita- ción de sus responsables. Un ejemplo muy frecuente ocurre cuando el proveedor es una pyme y el cliente un gran comprador: por ejemplo, una pequeña empresa que suministra a un gran fabricante, o un pequeño industrial de la alimentación que vende a una gran cadena de super- mercados. Sucede frecuentemente que el grande impone al pequeño condiciones de pago, descuentos, programaciones de los pedidos, decide unilateralmente retrasos en los pagos…, circunstancias que, en más de una ocasión, han acabado con la quiebra del proveedor. Aquí el director financiero puede estar a un lado (el poderoso) o al otro (el débil) de la relación, y, en muchas ocasiones, son actores importantes en ambos lados. Algunos opinarán que nos encon- tramos ante el juego normal del mercado: si el proveedor no ofrece unas condiciones intere- santes, el cliente tiene derecho a buscar a otro que se las ofrezca. Pero las cosas no son tan sen- cillas: para un pequeño proveedor servir a determinado gran cliente supone una oportunidad difícilmente rechazable; más en situaciones en las que vender es muy difícil y hay capacidad de producción infrautilizada en muchos sectores. Una vez que empieza a servirle, lo normal es que el gran cliente adquiera una parte significativa de su producción, y, a partir de ese momento, si no lo estaba ya antes, el proveedor queda completamente en manos del cliente. Nosotros pensamos que “exprimir” a los proveedores hasta el extremo es una mala política a largo plazo (los proveedores potenciales acabarán aprendiendo y se cubrirán a la hora de trabajar con ese cliente, la sociedad no aprobará esa actitud…), pero además es una falta de respeto hacia la li- bertad moral de un stakeholder como el proveedor, al que se le priva de un beneficio razonable y, en ocasiones, de la posibilidad de seguir existiendo.

9.4. CONCLUSIÓN

Hemos visto en este capítulo algunos de los dilemas éticos a los que se puede enfrentar un direc- tor financiero, algunosmás variados (en el caso de una pyme), otrosmás estrictamente financieros.

Así hemos ido comentando situaciones conflictivas donde pueden entrar en colisión diferentes bienes, todos legítimos y apreciables, y en las que puede haber zonas de duda. En cualquier caso, es importante discernir con prudencia. Si violar una norma para salvar la empresa a veces parece justificable, tenemos que valorar la importancia de la norma y el verdadero riesgo de la empresa. Pero también es importante resaltar que tales situaciones no dejan de ser excepcio- nes, y que lo normal es que el director financiero deba cumplir las leyes y las normas en general, tal como se espera de él en los mercados y en el conjunto de la economía.

En muchos de los temas que hemos ido comentando, el director financiero, como empleado de la empresa, puede encontrarse en situaciones muy difíciles al creer que debe actuar en

Made with FlippingBook - Online catalogs